Dentro de la mitología colombiana, el departamento de Antioquia
ocupa un lugar bien importante, por su riqueza y relación con el campo y la
fantasía, mitos y leyendas se han gestado, sus susurros se escuchan por todos
los caminos montañeros de esta tierra mágica.
Aunque la gran mayoría de historias de espantos y entidades, datan
de aquella época rural, en la que los poblados eran escasos y la gran mayoría
de los habitantes del país Vivian en sus parcelas, ya con el ingreso de nuevas
tecnologías y ahora si, poblados grandes y ampliamente habitados, nuevas
historias aparecen para estremecer las noches de poca luz.
Es esta la historia del automóvil negro, una entidad muy
particular y tecnológica, se dice que en las noches ya pasadas las once de la
noche comienza su recorrido por las carreteras de Antioquia.
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| Mitología Colombiana: El Automóvil Negro |
El automóvil negro es, obviamente de color negro, carrocería que
se le podría asimilar a un chevrolet grande, modelo cincuentón y luces bien definidas,
sus victimas lo han visto desde Medellín hasta la Heliconia y al parecer hace
el mismo recorrido cada noche.
La manera como se deja percibir es bien extraña, los conductores
que por aquellas solitarias carreteras transitan ven las luces de un carro
cualquiera, bien detrás de ellos, se escucha además el ruido del motor
constantemente pegado siguiendo a quienes alcanza.
El recorrido continua igual mientras le ceden el paso, ya que su
constante acoso así lo exige, además acompañado de un estruendoso y tétrico
pitido no deja mas opciones; y es en este momento donde se siente pasar por el
lado, pero oh sorpresa, no se le ve, y
mientras la zozobra inunda los nervios de las victimas, se dibuja nuevamente ya un poco mas de cien
metros adelante, sin explicación, pero el que hace un instante se veía a tras, ahora esta bastante distante.
El conductor es un misterio, pero parece haber consenso en que su
piloto es un tétrico esqueleto adornado con un sombrero ancho y blanco, pues es
a lo que mas se puede parecer a la distancia que se deja ver.
Así como es un misterio el paso por el lado de los demás autos, es
un misterio también el como nunca se le ve pasar por la plaza de bolívar de la
Heliconia, siendo esta la única posibilidad para atravesar el pueblo, son estas
particularidades las que hacen de el auto negro una de las historias preferidas
de los viajeros y de la región antioqueña.
